-Levántate...y anda

...Hay en Jerusalén, cerca de la puerta de las ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda, el cual tiene cinco pórticos.
En éstos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paraliticos, que esperaban el movimiento del agua.
Porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque, y agitaba el agua; y el que primero descendía al estanque después del movimiento del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviese.
Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho año que estaba enfermo.
Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo:
¿ Quieres ser sano ?
Señor, le respondió el enfermo, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; y entre tanto que yo voy, otro desciende antes que yo.
Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. Jn. 5. 2- 8

--Es muy común ver en estos días, escenas como estás, multitudes que yacen enfermas de espíritu, sumergidas en la droga, el alcoholismo, en infinidades de vicios.
Dios te creo para que fueras feliz y es Jesús la fuente de paz y felicidad, en la que todos debemos beber. Dios te está llamando para hacer de ti una nueva persona, para levantarte y darte vida en abundancia. Él dijo: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Mt. 11. 28. Ve a Jesús el te está llamando y te dice al igual que al paralítico: Levántate y anda.